Chantaje emocional

Habló con Cía y le explicó sus planes para los siguientes días. Cía asintió y aceptó su decisión. Pasados unos minutos, como arrepentida por haberla apoyado, se armó de valor y le dijo que quería ir a la playa y a pasear. Rup se sintió agredida, sentía que Cía la chantajeaba emocionalmente y así lo expresó. Cía se puso de morros y se fue a trabajar. Cuando volvió, Rup estaba ultimando sus preparativos para irse.

Trató de despedirse, pero Cía hablaba por teléfono e hizo un gesto de desprecio para que se fuera. En otro momento, hubiese funcionado. Rup se hubiese quedado amargada y amargando a Cía. Ahora ya no. Rup había descubierto el juego y no quería seguir jugando. Así que se fue y trató de olvidar su cara enfurruñada.