Te echo de menos, pero no estoy preparada, todavía...

Cris a Sadernes agost 2012

Hace días que quiero escribirte. Te echo de menos. Cuando pienso en tu contacto y tus formas me sudan las manos, la piel se me eriza y mi cuerpo se pone en tensión. Sabes que me estoy absteniendo para volver a merecer tocarte, sabes que en los últimos tiempos nos hemos visto y lo hemos pasado bien, pero que yo no era igual.




Dejé de ser yo para convertirme en lo que pasaba en el exterior, permití que profanaran nuestra relación, dejé de serte y serme fiel para convertirme en una más. Otra más que te toca, te prueba, te ensucia, te fuerza y se pelea contigo.




La gente me pregunta cuándo voy a volver a verte. Acercarme a ti me tienta. Me provoca el solo pensamiento de rozarte. Veo nuestras fotos y ardo en deseos de volver a estar junto a ti. Pero no, todavía no, quizá no sea capaz de conseguir desprenderme de mí misma para volver a fundirme contigo.




Lo mismo que me alejó de ti, ahora me incita a volver contigo. Es paradójico, lo sé. Pero sé que todavía no estoy preparada para nuestro reencuentro. Necesito echarte más de menos, necesito no necesitarte. Necesito recuperar la libertad de elegir volver a verte una y otra vez. Necesito no depender de ti.




Quiero elegirte cada vez. No quiero que lo nuestro se convierta en monotonía, en costumbre. Quiero que cada vez que te vea, quiera estar contigo. No quiero que sean mis manos las que vuelvan a ensuciarte sin sentido. Deseo volver a bailar, deseo dejarme llevar por la abstracción conjunta de nuestras conciencias entrelazadas. En el momento oportuno, lo sabré, sabré cuando estoy dispuesta para que mi onda colapse simultáneamente con la tuya.