Voluntad y fluir
¿Cuántas veces hemos soñado o planeado alguna cosa y hemos puesto todo nuestro empeño para que al final la vida nos depare un resultado diferente? ¿Debemos conformarnos y agradecer las circunstancias que nos tocan vivir o imponer nuestra voluntad hasta conseguir nuestra meta y, una vez alcanzada, seguir con otro sueño hasta volver a lograrlo y que se esfume entre objetivos cumplidos caídos en el olvido? ¿No se convierte eso en una búsqueda eterna de la felicidad? Un camino agotador que nos lleva a la desesperanza y a la extenuación de una carrera a contratiempo de sueños y esfuerzo.
¿Quizá la paciencia nos proporciona la sabiduría para encontrar el equilibrio de esa búsqueda de la felicidad, de una vida agradecida de cada instante eterno sin caer en la desidia o el conformismo?
¿Qué es la prudencia? ¿Es el estado que se alcanza si se aprende a fluir sin imponer nuestra voluntad?
La película Tigre y Dragón nos enseña como la historia de amor entre Yu Sha y Li Mu Bai se deshace o se mantiene para siempre a causa de las circunstancias y de la prudencia. Tal vez Li Mu Bai muere para que sea un bonito amor que no se daña por lo cotidiano y por imponer la voluntad. Pero si no se lucha por lo que se quiere, ¿cómo no caer en la desidia, en la parálisis? ¿Cómo seguir tu camino sin imponer tu voluntad y sin ser una marioneta vapuleada por las circunstancias? ¿Cómo acertar el momento oportuno para convertirse en un ser proactivo y no reactivo o pasivo?
¿Somos elementos pasivos de nuestra vida que ya está escrita?
Comentaris
¿Somos elementos pasivos de nuestra vida que ya está escrita?
Y yo creo que no y que sí, que no somos elementos pasivos y que nuestra vida ya está escrita.
¿Cómo reconciliar ambas cosas? Llamalo Koan, cuando lo tengamos reconciliado, ya no nos haremos preguntas :)