Fluir, tomar las riendas, forzar, compromisos, obligaciones y demás
De nuevo R. me ha abierto los ojos.
Llevo días dándole vueltas al justo equilibrio entre dejar fluir, tomar las riendas y forzar, las obligaciones y los compromisos.
Ayer hablé con R y me dijo:
"Sé egoista, haz lo que quieras, es tu vida"
¡y se hizo la luz! Resulta que llevo toda mi vida tomando decisiones por mí sola. Pero cuando dependo de otras personas (amistades, jefes, parejas), intento no imponer y me dejo llevar. Adopto una actitud conciliadora, anulo mi asertividad y prácticamente me anulo como persona. Empiezo a asumir compromisos que sólo yo considero como tales y poco a poco, voy menguando hasta desaparecer. Hasta que llega el momento en que mi vocecita interior empieza a aparecer, a reivindicar su espacio y, en ese momento, retomo las riendas de mi vida y soy egoista al 100%. Nadie entiende nada, pues de aceptar prácticamente todo, paso a hacer lo que me apetece sin considerar opción alguna, solo movida por mis deseos e instintos y ahí es cuando brillo, cuando saco lo mejor de mí.
Aunque tampoco es cierto del todo, pues no brillo por mí sola. Brillo por la luz de la que me he alimentado mientras estaba en mi penumbra, en mi renuncia de ser yo misma para "dejar fluir" y eso me condena, me desequilibra. Esas luces que me alimentan a menudo se extinguen agotadas y yo me extingo en un esfuerzo parasitario, dejando fluir...
Todavía no sé cual es el justo equilibrio entre dejar fluir, tomar las riendas e imponer. Pero sí he descubierto mi problema con las obligaciones. Cada vez que algo se convierte en una obligación, se debe a que he ido asumiendo compromisos conmigo misma sin importar o sin evaluar que lo que iba a tener a cambio me compensaba. Quizá al principio sí, pero luego, mi sentido de la responsabilidad me ha hecho acumular más y más compromisos hasta que algo placentero se convierte en una obligación que me anula y me doblega.
Tampoco tengo la clave para equilibrar el dejar fluir o el imponer. Pero intentaré tener más presente la voz de R. diciéndome:
"Sé egoista, haz lo que quieras, es tu vida"
Llevo días dándole vueltas al justo equilibrio entre dejar fluir, tomar las riendas y forzar, las obligaciones y los compromisos.
Ayer hablé con R y me dijo:
"Sé egoista, haz lo que quieras, es tu vida"
¡y se hizo la luz! Resulta que llevo toda mi vida tomando decisiones por mí sola. Pero cuando dependo de otras personas (amistades, jefes, parejas), intento no imponer y me dejo llevar. Adopto una actitud conciliadora, anulo mi asertividad y prácticamente me anulo como persona. Empiezo a asumir compromisos que sólo yo considero como tales y poco a poco, voy menguando hasta desaparecer. Hasta que llega el momento en que mi vocecita interior empieza a aparecer, a reivindicar su espacio y, en ese momento, retomo las riendas de mi vida y soy egoista al 100%. Nadie entiende nada, pues de aceptar prácticamente todo, paso a hacer lo que me apetece sin considerar opción alguna, solo movida por mis deseos e instintos y ahí es cuando brillo, cuando saco lo mejor de mí.
Aunque tampoco es cierto del todo, pues no brillo por mí sola. Brillo por la luz de la que me he alimentado mientras estaba en mi penumbra, en mi renuncia de ser yo misma para "dejar fluir" y eso me condena, me desequilibra. Esas luces que me alimentan a menudo se extinguen agotadas y yo me extingo en un esfuerzo parasitario, dejando fluir...
Todavía no sé cual es el justo equilibrio entre dejar fluir, tomar las riendas e imponer. Pero sí he descubierto mi problema con las obligaciones. Cada vez que algo se convierte en una obligación, se debe a que he ido asumiendo compromisos conmigo misma sin importar o sin evaluar que lo que iba a tener a cambio me compensaba. Quizá al principio sí, pero luego, mi sentido de la responsabilidad me ha hecho acumular más y más compromisos hasta que algo placentero se convierte en una obligación que me anula y me doblega.
Tampoco tengo la clave para equilibrar el dejar fluir o el imponer. Pero intentaré tener más presente la voz de R. diciéndome:
"Sé egoista, haz lo que quieras, es tu vida"
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